Casa en Villaviciosa

Muebles

Siempre soñé con despertar cada mañana, y al ver a través de mi ventana, encontraría el más asombroso paisaje verde que ofrece el campo asturiano. Puede decirte, con plena seguridad, que eso y más recibí al ser el propietario de esta encantadora casa adosada en Amandi, una tranquila localidad cercana a Villaviciosa.
En una frase podría decir que me enamoré a primera vista de este hogar de 96 m2, y con un solo vistazo, comprendí cuan feliz sería al compartirlo con los míos. Aquel primer día empecé mi recorrido por la parte trasera de la casa, apreciando el jardín que me daba la bienvenida, aparqué mi coche en el espacio adecuado para esto y continué con mi recorrido.
En la planta baja encontré un amplio salón en el cual imaginaba mil ideas para realizar, un cine en casa, una bodega de vinos, un taller de bricolaje… en algún momento le hice un par de mejoras, pero no medí el tiempo para transformarlo.
Subiendo las escaleras, llegué a la planta principal, donde se ubica el salón comedor con chimenea, el corazón del hogar; un espacio tan acogedor que invitaba al descanso en buena compañía. Desde aquí, también había salida a la calle, perfecto contar con dos entradas a casa.
La cocina es el espacio más coqueto del hogar y ofrece unas vistas tan espectaculares, que tomar el café en la mañana parece todo un evento. También, al lado, encontré el baño completo con bañera.
Al llegar a la tercera planta encontré dos cómodas y luminosas habitaciones, sin pensarlo demasiado, las reformé y añadí detalles únicos, como el lavabo a medida hecho por el alfarero Lario de Lorca, el cual se encuentra en un aseo privado del dormitorio principal. Te puedo decir con toda seguridad que mis mejores descansos los tuve en ese dormitorio.
Amé esta casa porque fue el escenario de los momentos más felices de mi vida, no solo dentro de sus estancias, también, los recorridos en el pueblo, teniendo todos los servicios a un paso, además de la cercanía a la senda que rodea el rio Linares, hasta la Ria de Villaviciosa.
Hoy, cierro uno de los capítulos más felices de mi vida al vender esta casa, pensando en las historias que aún tiene por contar junto con nuevos protagonistas. Deseo ver tu sonrisa el día que te conviertas en el nuevo propietario y todo lo que vivirás en esta casa llena de encanto.
Mis amigos de Prada Inmobiliaria te darán toda la información que necesitas. Mientras tanto, nos vemos en la notaría.